PARÁLISIS FACIAL

La parálisis facial consiste en la pérdida total o parcial de movimiento muscular voluntario en un lado de la cara. Se produce por un fallo en el nervio facial, que no lleva las órdenes nerviosas a los principales músculos de la cara.
Sus manifestaciones más reconocibles son:

  • Incapacidad para cerrar el ojo y para sonreír
  • Alteraciones en el habla
  • Imposibilidad para levantar la ceja
  • etc.

TIPOS DE PARALISIS FACIAL:

La parálisis facial central es aquella que se produce por una lesión a nivel cerebral (no a nivel del nervio). Afectará solo a la mitad inferior de la cara (no habrá dificultad para cerrar el ojo ni levantar la ceja).
La parálisis facial periférica es una debilidad o falta de movilidad de los músculos de un lado de la cara. Esto sucede cuando el nervio facial, que controla esos músculos, se daña en algún punto de su recorrido y deja de funcionar.

CAUSAS DE LA PARÁLISIS FACIAL:

Daño o hinchazón del nervio facial, el cual lleva señales del cerebro a los músculos de la cara.
Daño al área del cerebro que envía señales a los músculos de la cara.

En personas sanas, la parálisis facial se debe a la parálisis de Bell, una afección en la cual el nervio facial resulta inflamado.

Un accidente cerebrovascular puede causar parálisis facial. Y otros músculos en un lado del cuerpo también pueden resultar comprometidos.

La parálisis facial debido a un tumor cerebral generalmente se desarrolla de manera lenta. Además se manifiestan otros síntomas como: dolores de cabeza, convulsiones o pérdida de la audición.

En los recién nacidos, la parálisis facial puede ser causada por traumatismo durante el nacimiento.

Otras causas abarcan:
Infección del cerebro o de los tejidos cercanos.
Enfermedad de Lyme (transmitida por picaduras de garrapatas).
Sarcoidosis (crecimiento de pequeñas acumulaciones de células inflamatorias en cualquier parte del cuerpo).
Tumor.

Ante cualquier síntoma y duda, acudir a un profesional sanitario para su pronto diagnóstico y tratamiento.